domingo, 25 de octubre de 2020

Supervivencia


Soy un superviviente, siempre me he considerado así. Más que un luchador, que no lo soy. Me amoldo a las circunstancias, he vivido estos casi 62 años que llevo ya por aquí de ese modo. Como un burro con orejeras. Intento salir de todos los (muchos) atolladeros en los que la vida nos mete por mi cuenta, raro es que pida ayuda, y raro es que cuente mis apuros, mis temores, mis problemas. Quienes me conocen, saben que no miento. Muy pocas personas en este mundo saben cómo soy, cuales son mis sueños, mis temores, mis penas y mis alegrías. No me quejo. Ha sido siempre así por propia voluntad. Y, teniendo en cuenta que, como he dicho antes, no soy una persona especialmente luchadora, creo que no me ha dicho mal del todo. Tengo un trabajo estable, un sueldo suficiente, una familia muy pequeña pero muy valiosa y unos amigos y amigas que son mis hermanos. Aunque no soy muy comunicativo sobre mis asuntos, me siento querido y protegido.

Hace unos meses, y en mi caso tras varios acontecimientos nada buenos, la vida de la humanidad comenzó a cambiar. Para todos. Todos, en cualquier parte del mundo hemos tenido que asumir montones de cosas impensables diez minutos antes del comienzo de la pandemia. Todos hemos visto cambiar nuestra vida radicalmente, y hay infinidad de estudios sociológicos y sicológicos que tratan este asunto. Esto está siendo importante y muy duro para todos, pero éste es mi blog, y en él, aunque la mayoría de las veces mediante imágenes, hablo de mi. Y eso voy a hacer, de modo que si no os interesa, podéis dejar de perder vuestro tiempo.

Os confieso que por primera vez en mis casi 62 años me veo incapaz de salir, de continuar, de mejorar o, como mínimo, de aguantar. Hasta ahora, por mal dadas que me vinieran las cartas, manejaba jugadas alternativas, vislumbraba posibles recuperaciones, encontraba rocas donde apoyarme, y por largo que viera el camino eso no me importaba, porque mi intuición me decía que al final seguía adelante. Suelo confiar mucho en mi intuición, porque de momento suele ser muy certera, y mi intuición no augura nada bueno. No me gusta nada, pero nada, el futuro que veo. No me gusta nada la situación y el mundo que me rodea, y llevo meses, meses, viviendo la vida con mucha tristeza y angustia. Jamás sospeché siquiera que personas cercanas a mi, de ser unos iluminados inofensivos iban a convertirse en feroces, si feroces negacionistas, mentirosos, violentos, insultantes, fascistas....locos. Peligros para la sociedad. Tengo la suerte de "conocer" a la gente casi al primer golpe de vista, o eso creía, porque con algunas personas me he equivocado radicalmente, y eso me duele mucho. Cada vez que publican una mentira, cada vez que hablan de cosas que solo existen en sus enfermizas cabezas a mí se me hace un nudo en la garganta. Lo que me asusta, además de que intuyo que tras ésta, vendrán otras pandemias, es que el mensaje de lo que se llama eufemísticamente "post verdad", y que no es más que lo que hasta ahora se ha conocido como "mentira", cale en mucha gente desesperada y harta. Muchas otras veces ha funcionado, pero pondré uno de los ejemplos que siempre se pone, el ascenso y mantenimiento del nazismo.  Cuando las personas, como pasó en la Alemania de los años 20-30, están desesperadas y no tienen certezas ni seguridades, movimientos como el nazismo lo tienen facilísimo. Ahora, mucha gente  está desesperada, una parte de ella no puede asumir que la ciencia por definición es duda e incertidumbre, y buscan creencias, respuestas para todo, buscan lo que la ciencia no pueden darles y estos mentirosos si.

Yo ya no discuto siquiera con ellos, me dan miedo, lo reconozco. Siempre supe que nuestra sociedad no estaba tan evolucionada como pensábamos, pero jamás intuí que anduviéramos aún en la época de las cavernas. El pensamiento mágico, las creencias, las doctrinas que tienen respuestas a todas nuestras angustias siguen muy presentes en nuestra sociedad, y eso configura un futuro aterrador. Durante el período de ascenso de los nazis hubo personas de la calle, como yo, que se dieron cuenta de lo que se avecinaba, y también muchos intelectuales, como Brecht y muchos otros. Cuando los nazis obtuvieron con malas artes (no, no fueron el partido más votado, eso es un bulo) el poder, amigos mataron o purgaron a amigos, gente encantadora se volvió demoníaca y los "disidentes" o fueron asesinados o tuvieron que salir por piernas. Pues bien, creedme, no excluyo que eso pudiera pasar en cualquier parte y en cualquier momento, y esta pandemia puede ser un caldo de cultivo ideal para esto.

Y luego está este país, este país en concreto,  Aquí muchas personas que yo tenía por sensatas, aunque políticamente no coincidamos, toman derroteros similares a los que han ido tomando los votantes de energúmenos como Bolsonaro o Trump. Así, para muchos, español = ladrón o asesino, izquierdista = ladrón o asesino, quienes aun pensamos que el criterio científico debe prevalecer = vendido, ladrón o asesino, etc. Y lo dicen en serio. Y probablemente lo creen firmemente. Muchas personas, han tomado ya sus decisiones, que a mi modo de ver nos ponen a todos en una situación muy peligrosa y nada deseable. Y eso, creo, no lo va arreglar ni una vacuna, porque habrá muchos que no se vacunen, ni salir de la pandemia, porque entonces, para desgracia del progreso humano, muchos estaremos a siglos de distancia de todas estas personas.

No, no me gusta nada el futuro que veo. No, no quiero convivir con todas esas personas que quieren y (ojalá que no) podrían llevarnos siglos atrás en la historia del progreso de la humanidad. Pero tampoco puedo ni quiero hacer nada más por evitar que eso pase que seguir las normas sanitarias, intentar ser un buen tipo, coherente y sensato y disfrutar con mis fotos, mi familia y mis amigos siempre que pueda.

Ah, tranquilos, no estoy ni para pegarme un tiro, ni nada por el estilo. Simplemente, y por primera vez en mi vida, no me gusta nada lo que se nos viene encima a las personas de buena voluntad.

Ojalá haya suerte y me equivoque-




jueves, 14 de mayo de 2020

Burgos (III). El Santo, el Friki y el Comilón

En esta (de momento, hasta la próxima visita) última entrada sobre Burgos, hablaré de tres entornos de los alrededores, radicalmente distintos entre si, pero interesantes y muy recomendables. Gracias a las sabias indicaciones de nuestra guía pudimos hacerlo de manera que visitamos los tres lugares, comiendo en el último de ellos y llegando de nuevo a Burgos con tiempo de recorrer otra parte de la ciudad.

Estos tres lugares son el pueblo y monasterio de Santo Domingo de Silos, el lugar donde Sergio Leone ubicó el cementerio de Sad Hill, donde se rodó la mítica secuencia del duelo a tres, de su magistral película "El bueno, el feo y el malo", y el tercero es Covarrubias, uno de los pueblos más bonitos de España, y donde además de pasear por sus medievales calles disfrutarás de una gastronomía de primera.

Nosotros, la ruta la hicimos por ese mismo orden, y salvo que tanto Siri como Ok Google tuvieron ciertas discrepancias sobre la ruta a Sad Hill, y nosotros mismos que dudamos de ambos, y que la ruta, aunque corta es lenta porque discurre por caminos pedregosos, fuimos sobrados de tiempo.

Comienzo con la ruta.

SANTO DOMINGO DE SILOS

A unos 60 km de la capital, se llega por una buena carretera, que se interna poco a poco en un paisaje algo montañoso, y muy bonito, hasta que llegas al pueblo, el cual es muy pequeño. Es bueno dejar el coche en alguno de los aparcamientos que hay a la entrada y llegar paseando al monasterio. Pronto aparece a tu derecha la tapia del huerto del monasterio, que ya no dejarás en un rato, hasta que a tu izquierda aparezca la plaza mayor del pueblo, y a tu derecha la entrada el monasterio. Habrás pasado antes la entrada principal, que es a través de un patio, al cual pudimos pasar, pero que no permite el acceso al interior del edificio. Éste se hace a la vuelta de la esquina.

Os muestro fotos de pueblo, monasterio y claustro, de gran belleza, y he de decir que nos fue muy bien explicado, con todo lujo de detalles históricos, artísticos y religiosos por un guía realmente muy amable.





Plaza mayor
Entrada principal, había una exposición de Antonio López, y la escultura es suya

Monasterio

Entrada al claustro


























EL CEMENTERIO DE "SAD HILL"

Antes que nada, si no sabes de qué hablo, casi seguro que no merece la pena que vayas. La ruta es pedregosa y lenta, de modo que si no te atrae lo suficiente lo que cuente yo ahora, o no sabes de qué va, puedes dedicar más tiempo a Silos o a Covarrubias.

Esta es una de las localizaciones que Sergio Leone escogió para el rodaje de "El bueno, el feo y el malo", tercera entrega de la mítica "Trilogía del dólar", -"Por un puñado de dólares", "La muerte tenía un precio", y ésta-. Yo, que soy aficionado al buen cine y al buen western, y que por supuesto conocía y había visto varias veces la película, desconocía que el cementerio se ubicaba casi al lado de Silos, pero como ya os he dicho, en este viaje fuimos excelentemente aconsejados.

El cementerio quedó abandonado tras el rodaje, y hace unos años, unos entusiastas de varias partes del mundo se pusieron manos a la obra, con el apoyo de varios de los participantes en la película, y personas tan alejadas de ese mundo como el cantante y líder del grupo de rock Metallica, y consiguieron que renaciera. La financiación la obtuvieron en su mayor parte, vendiendo las tumbas a un monton de frikis, que han visto su nombre en una de las lapidas o cruces del cementerio. Hay un estupendo documental de Netflix donde se explican anécdotas del rodaje y de la recuperación del cementerio.

Se llega por un camino dificultoso desde Santo Domingo de Silos, o desde Covarrubias, que es menos malo, pero queda más alejado. Nosotros llegamos desde Silos y salimos hacia Covarrubias.

Os pongo unas pocas fotos, la escena del duelo, y el trailer del documental de Netflix














COVARRUBIAS

De vuelta hacia Burgos, desde Silos o desde Sad Hill, debes pasar por Covarrubias. Es un pueblo muy bonito, y muy bien cuidado. De esos que aparecen en las listas de los pueblos más bonitos de España. 

Estuvimos el tiempo suficiente para saber que habría que volver con más tiempo, lo mismo que nos pasó con Burgos. 

En realidad, visitamos Covarrubias, además de por la belleza del pueblo, por un manjar exquisito que también hace muy recomendable que vayas: La Olla Podrida. Un magnifico cocido con alubias, que no te arrepentirás de degustar. Hay varios sitios donde la preparan. A nosotros nos recomendaron "Casa Galín", y os aseguro que merece la pena. El sitio no es lujoso, pero sí agradable, el trato familiar y el producto de primerísima calidad. Muy recomendable.

Os dejo unas pocas fotos.

Impresionante



Y aquí acabamos con este fugaz viaje a Burgos y alrededores. Merece la pena dedicarle muchos más días, cosa que haremos en cuanto podamos. Espero que os haya motivado lo suficiente para animaros a hacer turismo interior por una zona realmente atractiva


LOS OTROS DOS CAPITULOS









jueves, 30 de abril de 2020

Burgos (II). Lo divino y lo humano

LO DIVINO

Como ya dije en la anterior entrada, Burgos es una ciudad que merece la pena conocer, y os mostré algo de lo poco que me dio tiempo a recorrer. Pero, aunque solo fuera por ver su catedral, merecería la pena el viaje.

La Catedral, patrimonio de la humanidad es una joya del gótico mundial, si bien, como suele suceder, a lo largo de su historia ha tenido ampliaciones o modificaciones renacentistas o barrocas, El templo es de una belleza y espiritualidad en las formas imponentes.

No seguiré hablando, me voy a limitar a poner una serie de fotos exteriores e interiores que espero os den una idea de lo que os perdéis si no vais a conocer esta maravilla.

A continuación de las fotos, y para concluir la entrada os haré unas pocas recomendaciones gastronómicas, las pocas que pudimos disfrutar en una visita tan breve.





































LO HUMANO

Burgos tiene una amplia oferta de restauración. En el  centro histórico hay numerosos locales donde tomar algo, tanto líquido como sólido. Nosotros fuimos a tiro hecho, excelentemente guiados, y la verdad es que todas las recomendaciones fueron acertadas. Aquí os las contamos.

Desayunar en Ibáñez, un lugar acogedor, donde tomar un buen chocolate con churros, en pleno paseo del Espolón.



TOMAR EL VERMUT: Vermutería Victoria, Plaza del Rey San Fernando, 4. A medio paso de la Catedral. Un lugar con mucho ambiente, y buen vermut para reponer fuerzas después de la visita a la catedral.




COMER: Restaurante casa Ojeda, calle Vitoria 5. Parece, y en cierto modo lo es, un lugar pensado para el turismo. Aún así, no te dejes llevar por las impresiones y dale una oportunidad. Muy buena comida y buen  trato, Barato no es, pero la relación calidad - precio es buena. Si quieres pedir algo típico, pide Lechazo, y disfruta.





CERVEZA: hay multitud de tascas en el centro histórico, sin embargo, encontramos una cervecería belga en la preciosa calle Huerto del Rey, la Cervecería Flandes, en cuya terraza, si el tiempo acompaña, puedes tomar una buena cerveza de abadía viendo la catedral al fondo.



UNA PICAETA: Los Finos, corte y burbuja, montaditos de jamón ibérico o de atún y anchoas, y una muy buena selección de vinos, decoración moderna, buena música y ambiente muy agradable. Arco del Pilar 8.



Hasta aquí las entradas sobre la preciosa ciudad de Burgos. En próximas visitas, que las habrá, ampliaremos fotos e información.

En la siguiente entrada....



Sad Hill bien vale una película - Faro de Vigo



Emulando a Clint, entre otros divertimentos.